Todavía recuerdo el primer día que fui a casa de Toni la mamá de mi novio Eduardo; teníamos apenas 1 mes de novios. La primera persona que me recibió con una sonrisa en su rostro era Vivi, la hermana mayor de Lalo. En ese entonces todavía desconocía la relación tan especial que tenían ellos dos.

Al pasar de los años entendí que tenía 2 suegras ya que Vivi siempre cuidaba, quería y velaba por Eduardo. Siempre estaba presente en nuestras vidas para las alegrías, compartiendo la felicidad, y a veces, si no siempre, para hacerlas realidad. Y en los momentos tristes ella estaba presente para abrazarnos y cuidar nuestro bienestar.

Para mis hijos, que son un milagro de vida, Vivi era su tía que les hacía reír, creaba juegos para cada uno y los consentía con sus detalles especiales. Te extrañaremos siempre y te enviamos muchos besos ✨⭐️💫🌟✨⭐️💫🌟✨⭐️

Carla